Última actualización: 21.11.24

 

Durante muchos años, no hemos tenido demasiadas opciones para alimentar a nuestras mascotas, más allá del pienso de siempre. Sin embargo, el mercado ha cambiado y hoy día encontramos alternativas mucho más interesantes, tales como el alimento hidrolizado.

 

Si piensas en tu dieta de hace unos años, 10 por ejemplo, seguramente que la misma haya cambiado de forma considerable respecto del tipo de alimentos que consumes. Algo que ocurre también cuando vamos al supermercado, donde cada día que pasa tenemos opciones más sanas y saludables para comprar.

Este mismo movimiento que ha ocurrido en los humanos también está presente en las empresas dedicadas a elaborar piensos para animales. La prueba la tenemos en novedades como el alimento hidrolizado para perros, que es una de las últimas en llegar al mercado. Un producto ideal para animales sensibles y que aporta un perfil nutricional muy interesante. Si nunca has oído hablar de este tipo de alimentos o quieres saber más sobre él, te damos todas las respuestas a continuación.

 

Qué es el alimento para perros hidrolizado

Como su propio nombre indica, este sería el alimento que se ha elaborado mediante un proceso de hidrólisis. Este requiere el uso de agua para romper de forma química las macromoléculas de las proteínas, obteniendo así una proteína de menor tamaño molecular y que genera numerosos beneficios para el animal.

Lo mejor de este proceso es que no altera la calidad de dichas proteínas, por lo que el alimento resultante mantiene de forma adecuada su poder nutritivo en términos proteicos. Tampoco deja residuos derivados del proceso de hidrólisis, puesto que en este lo único que usa es agua, debidamente tratada para que tenga la máxima pureza. 

Por cierto, aunque este proceso parezca algo novedoso, el mismo lleva años aplicándose en otros sectores relacionados con la alimentación. El más importante es el de las papillas y otros alimentos infantiles, en el que los cereales hidrolizados suelen ser la base del producto. En este caso, el proceso se emplea para romper las cadenas de almidón de dichos cereales en elementos más sencillos, más nutritivos y más fáciles de digerir por parte de los bebés. Así que el planteamiento es el mismo que venimos comentando en el caso de los alimentos para mascotas.

 

¿Qué beneficios tienen los alimentos hidrolizados?

La idea de romper las proteínas y convertirlas en otras más pequeñas no es un capricho, sino que tiene un motivo. Son muchos los perros que tienen enfermedades alérgicas o autoinmunes, relacionadas con la síntesis de las proteínas. Esta dolencia aparece en perros de edad media o avanzada y hay ciertas razas que tienen una mayor tendencia a desarrollar la enfermedad, entre las que tenemos el Boxer, el Labrador o el Pastor Alemán, entre otras.

La principal ventaja que tiene el proceso de hidrólisis es que, al reducir el tamaño de las proteínas, estas no son detectadas como una amenaza por parte del sistema inmunitario del animal y, en consecuencia, no activan la respuesta inmunitaria que causa los problemas de alergia. Por tanto, el perro puede disfrutar de una alimentación completa sin los problemas digestivos que generarían los alimentos convencionales.

Otra ventaja de este tipo de alimentos es que permiten que el animal coma incluso alimentos a los que tenga cierto nivel de alergia, precisamente por esa incapacidad orgánica de reconocer las proteínas que ingiere. Así pues, un perro sensible a las proteínas de la carne de ternera, por ejemplo, podría ingerir un alimento hidrolizado a base de este ingrediente.

¿Los alimentos hidrolizados tienen algún inconveniente?

Aunque el proceso de hidrólisis tiene muchas ventajas, también cuenta con algunos inconvenientes que conviene conocer. Uno de los más importantes tiene que ver con el proceso digestivo. Dado que las proteínas ya han sido descompuestas durante el proceso de hidrólisis, el proceso digestivo se acorta y se vuelve innecesario, lo que afecta parte de las enzimas implicadas en el mismo.

Otro inconveniente de este tipo de alimentos es que este proceso de hidrólisis a veces puede eliminar parte de las micro partículas contenidas en la proteína. Algo que, generalmente, no afecta en exceso al perfil nutricional de la fórmula, ya que estos elementos se reemplazan por otros similares o, simplemente, se aporta más proteína hidrolizada para cubrir esa carencia de microelementos.

Finalmente, algunos de los alimentos hidrolizados que encontramos en el mercado tienen fuentes de proteína de baja calidad, tales como la famosa soja. Algo parecido a lo que ocurre también con los alimentos convencionales. Todo ello sin olvidar que muchas de estas fórmulas tienen un contenido de carbohidratos más elevado de lo que sería deseable, lo que tampoco es conveniente para ciertas mascotas

 

¿En qué casos se recomiendan los alimentos hidrolizados?

Esta respuesta debería dárnosla un veterinario que, tras diagnosticar adecuadamente a nuestra mascota, nos indique el uso de este producto. De hecho, las marcas que ofrecen este tipo de alimento suelen hacerlo dentro de sus dietas de tipo veterinario, aunque su venta es libre para todos los usuarios.

Dicho esto, este tipo de alimentos es adecuado para todas aquellas mascotas que sufren de problemas de hiperactividad del sistema inmunitario o alergias. Entre estos, tendríamos los casos de enfermedad inflamatoria intestinal o EII, que pueden aparecer a cualquier edad y con un mayor auge a medida que el perro se va haciendo mayor.

No obstante, es clave saber que este alimento solo sirve para “engañar” al sistema inmunitario del animal, a fin de evitar la respuesta que generan las proteínas convencionales. Por lo tanto, este alimento no elimina la enfermedad, ni tampoco supone tratamiento para la misma. Algo que es importante tener en cuenta respecto de cómo mantener el resto de la alimentación del perro.